Nacho volvió a entrar a la casa de Gran Hermano después de la final

13:00 | Martes 28 de Marzo de 2023 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

Georgina Barbarossa comenzó su programa de una manera inusual. Entró a la casa de Gran Hermano junto a su equipo de panelistas, horas después de la gran final en la que Marcos Ginocchio se consagró campeón del reality.

Georgina y su staff recorrieron la casa, revisaron los placares, usaron los maquillajes de las chicas y hasta se probaron su ropa. Les hablaron a las cámaras y charlaron con la voz en off de Gran Hermano. Después se sentaron a desayunar y a debatir sobre el reality cuando, de repente, se volvió a abrir la puerta e ingresó Nacho Castañares, el participante que quedó en el segundo lugar.

No tuvo tiempo ni ganas de descansar. Tras salir de la casa, saludar a sus fans y después a sus familiares dentro del estudio, Nacho se fue a un hotel donde tenía que dormir solo en una habitación. Pero no pudo conciliar el sueño: “Esto es una locura, no lo puedo creer. No hablé con nadie. No pude dormir”.

Nacho también contó qué le dijo a Marcos cuando anunciaron que había salido campeón: “Yo lo felicité mucho, le dije que se lo merecía que era la mejor persona que había conocido. Se lo recontra merece. Entonces me agradece, me pide perdón”.

Después habló sobre la aparición de las mariposas y lo que simbolizan para él: “En momentos claves que lo necesitaba, aparecía la mariposa. Era mi mamá… El momento más difícil fue Año Nuevo porque sentía que le estaba faltando a mi familia, sobre todo a mi abuela, era el primer Año Nuevo sin mi mamá”.

“Yo si era por mí, me quedaba. Lo que viví acá no me lo voy a olvidar nunca, mejoré como persona un montón. Descubrí que las malas comunicaciones me matan, las injusticias, las traiciones. Me fui dando cuenta acá en una convivencia con tantas personas y con gente desconocida”, analizó Nacho, que contestó una a una las preguntas de la conductora y de su panel, al tiempo que veía imágenes sobre la final del programa: “Acá adentro creíamos que el mundo se había detenido pero salir y ver tantas cosas, fue hermoso. Ver gente que admiramos mucho cómo nos hacían el aguante, es una locura”.