Las revelaciones del hijo de Yiya Murano: "Me quiso matar cuando era chico"

19:49 | Lunes 22 de Agosto de 2016 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

Martín Murano, hijo biológico de Yiya Murano, la envenadora de Monserrat, condenada por la Justicia por matar a tres amigas a las que les debía dinero a fines de la década del 70, reveló que la mujer intentó matarlo cuando era chico.

Martín, que viene de reeditar su libro "Mi madre, Yiya Murano", aseguró en una entrevista con el programa Basta de todo, por FM Metro, que no se siente hijo de la Yiya.

"Soy hijo biológico, pero no me siento su hijo. Para mí es una persona cercana a mí. Hubo una señora que trabajó como empleada doméstica que cumplió algunas funciones del rol de madre", aseguró Murano.

"Actué mucho en contraposición con lo que hacía Yiya. Yo veía que desayunaba con amigos masculinos y no había que decirle a papá y pensé que el mundo era así, pero me di cuenta de que Los Locos Adams éramos nosotros", señaló Martín, que trabajó como doble de riesgo y en la actualidad es guardaespaldas.

"Mi viejo fue una víctima totalmente inocente. Yo fui un testigo involuntario. Yiya mató a sus amigas por plata, no hay nada peor que eso. El veneno estaba en el té. Ella me lo confesó a mí cuando se escapó", reveló el hijo de Yiya.

"Yo fui a verla para que se entregara. Me quiso matar cuando era chico. Me dio una torta envenenada cuando tenía 10 años. Cuando me llevé la porción a la boca me la sacó de las manos. Ahí me confesó que el veneno estaba en el saquito de té, donde ponía cianuro. Hubo otras muertes más, donde no la llegaron a condenar. Fueron más de tres. Se habla de siete", contó Murano.

"Vos sos lo que tenés que ser, no lo que tus viejos quieren que seas. Vos sos el producto de lo que vos te forjaste. No tiene nada que ver la influencia de tus viejos. Yo tengo un problema coronario porque consumí cocaína en algún momento, tuve un infarto. La cocaína no es gratis, los anabólicos tampoco. Soy instructor de artes marciales y escritor. Pero no fue por mis viejos. Habrá alguna influencia de mi infancia", cerró el escritor.