Noti-Denuncia
Cuando hablamos de un slogan tan contundente como el que tiene la municipalidad de La Rioja...
Lunes 25 de Noviembre de 2013
Cuando hablamos de un slogan tan contundente como el que tiene la municipalidad de La Rioja, "La Rioja la hacemos todos", uno supone que la gestión tiene como objetivo la concientización ciudadana en cuidar los más elementales conceptos para llevar adelante un plan integral que haga que la ciudad avance, de modo que habitar en ella, nos haga partícipe de vivir dignamente.
Si bien hay que reconocer que la cultura del ciudadano Riojano, en su mayoría, no es muy responsable en sus conductas en cuanto a la convivencia ordenada y armoniosa, también hay que sumar, que algunos sectores de la Municipalidad no cumple fehacientemente con el rol que toca cumplir.
En este caso quiero referirme al servicio de recolección de residuos, que en su concepción forma parte de uno de los pilares esenciales para tener una ciudad ordenada sana y limpia.
En lo que respecta a mi barrio, zona 6, el aseo, tanto sea de recolección de residuos, como la limpieza de baldíos, barrido manual de calles, etc., es una materia pendiente a mejorar, de una gestión que se jacta de excelente. No solo que no cumplen el cronograma correspondiente en tiempo y forma, (por ej.: ya hace cuatro días que no pasa el camión a recolectar la basura), y no es la primera vez, sino que las denuncias no son tenidas en cuenta.
Uno como ciudadano común se pregunta: ¿Las aptitudes de los funcionarios responsables de estas áreas son compatibles con la necesidad de una ciudad? Parece ser que la respuesta es tan obvia como la pregunta misma. NO.
Entonces, como yo no quiero ser cómplice de los incapaces, que ponen en serio riesgo de salud a la poblacion, que no aman su ciudad, que usurpan cargos que evidentemente no saben ejercer, y que cuando pasa algo miran para otro lado, denuncio.
Cabe destacar que ante el reconocimiento del mismo Gobernador de la provincia sobre la entrega de dádivas y clientelismo político uno se sienta avasallado ante tanta corrupción, pero la esperanza es lo último que se pierde y confío aún en el sentido común de algún funcionario decente que quiera tomar esta nota como parte de los que realmente pensamos en una sociedad mejor.