El 2024 estuvo marcado por el ajuste fiscal y la paralización de la obra pública nacional. Sin embargo, el gobierno de Ricardo Quintela impulsó proyectos clave con recursos propios, amortiguando el impacto en el empleo y el desarrollo provincial.
18:18 | Viernes 20 de Diciembre de 2024 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
El sector de la obra pública en La Rioja enfrentó un 2024 complejo, con fuertes restricciones debido al ajuste fiscal implementado por el gobierno nacional. Según Marcelo Del Moral, ministro de Infraestructura de la provincia, “por decisión política del presidente Milei, se paralizó toda la obra pública nacional en la provincia”, lo que representó un golpe significativo para el desarrollo de infraestructura y la generación de empleo.
A pesar de este contexto adverso, el gobierno provincial tomó la iniciativa para reactivar obras esenciales con recursos propios. “Gracias a la decisión del gobernador Ricardo Quintela, logramos recuperar muchas obras que estaban paralizadas, respondiendo a las demandas de los intendentes y generando fuentes de trabajo”, destacó Del Moral.
Entre los proyectos retomados, se encuentra la obra de Renovación Urbana en el centro de la capital, que ha avanzado considerablemente. El ministro resaltó su importancia al señalar que “ahora, con las lluvias, el centro ya no se inunda como antes”. Este proyecto continuará a partir de febrero y marzo de 2025, buscando completar mejoras esenciales para la ciudad.
El impacto positivo de estas acciones fue evidente en localidades tanto de la Capital como del interior provincial. Obras de infraestructura vial, urbanística y de servicios esenciales fueron reactivadas, mitigando en parte los efectos de la paralización nacional. Sin embargo, el desafío persiste, ya que muchas iniciativas dependen de fondos externos que aún no han sido garantizados.
El balance de 2024 refleja un panorama mixto: por un lado, el ajuste fiscal nacional limitó significativamente las inversiones, pero por otro, el gobierno riojano logró sostener la actividad en el sector a través de gestiones locales. De cara al 2025, las expectativas se centran en la continuidad de los proyectos provinciales y en la posibilidad de retomar colaboraciones con Nación.
La obra pública, clave para el desarrollo de La Rioja, seguirá siendo un área prioritaria para el gobierno, que deberá enfrentar los retos de financiamiento y planificación en un contexto aún incierto.
