Ya son 158 los muertos por las inundaciones en el oeste de Nigeria

El saldo mortal producto de las graves inundaciones que azotaron el oeste de Nigeria se elevó a 158 muertos en las últimas horas, según confirmaron este sábado las autoridades locales a la agencia EFE. La tragedia tuvo lugar en la aldea de Kpege, ubicada en el área de gobierno local de Mokwa, en el estado de Níger.

Las intensas lluvias, que comenzaron en la madrugada del jueves, tomaron por sorpresa a los habitantes de la región mientras dormían. En cuestión de horas, decenas de viviendas fueron arrasadas por el agua, vastas extensiones de tierras de cultivo quedaron bajo el agua, y los cuerpos comenzaron a ser encontrados flotando en el río Níger.

"Sí, hemos recuperado más cadáveres. Hasta el momento, se han recuperado 158", declaró a EFE Ibrahim Hussein, portavoz de la Agencia Estatal de Emergencias de Níger (NSEMA). La cifra supera el reporte preliminar de 115 víctimas fatales que se había dado a conocer el viernes.

Según detalló Hussein, los equipos de rescate continúan con las labores de búsqueda de desaparecidos, mientras el número de desplazados se cuenta por miles. Se estima que más de 3.500 viviendas han quedado completamente destruidas, y numerosas familias han perdido todos sus bienes.

Prometen asistencia y apoyo federal

La Agencia Nacional de Emergencias (NEMA) informó que, además de las muertes y los desplazamientos, decenas de personas resultaron heridas y fueron evacuadas a centros de salud en la zona. Algunas recibieron atención médica en el mismo lugar del desastre, mientras que otras fueron dadas de alta tras recibir primeros auxilios.

Inundaciones en Nigeria. las intensas lluvias, que comenzaron en la madrugada del jueves, tomaron por sorpresa a los habitantes de la región mientras dormían.

Las lluvias torrenciales comenzaron alrededor de las 3:00 de la madrugada del jueves y se extendieron durante varias horas. Al menos 50 viviendas quedaron completamente sumergidas y el impacto sobre la producción agrícola local es todavía incalculable.

Ante la magnitud de la tragedia, el presidente de Nigeria, Bola Ahmed Tinubu, expresó su "profunda preocupación" y envió un mensaje de condolencias a las familias afectadas y a la población del estado de Níger. En un comunicado publicado este sábado, aseguró que todas las agencias federales pertinentes han sido movilizadas para colaborar con los esfuerzos de rescate y asistencia, y prometió que "ningún nigeriano afectado por este desastre quedará abandonado".

Entre las medidas de emergencia, el gobierno ha distribuido alimentos, tiendas de campaña, utensilios de cocina y agua potable para los damnificados.

Nigeria frente al cambio climático

La catástrofe pone nuevamente en evidencia la vulnerabilidad de Nigeria frente al cambio climático, las lluvias extremas y la precariedad de sus infraestructuras.

Solo en 2024, más de 64.000 personas fueron desplazadas por las inundaciones, según la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur). En 2022, el país vivió sus peores inundaciones en una década, con un saldo de 600 víctimas mortales.

Nigeria, el país más poblado de África, enfrenta año tras año episodios similares, especialmente durante la temporada de lluvias, lo que plantea enormes desafíos en materia de gestión de riesgos, planificación urbana y protección civil.

Mientras la población de Kpege intenta recuperarse del desastre, las autoridades insisten en que la búsqueda de cuerpos continuará en los próximos días.